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sábado, 16 de octubre de 2010

Cafe como exfoliante anticelulitico

La eficacia de un producto anticelulítico aumenta con el masaje y con la exfoliación de la piel. ¿ Qué opinarían si les cuento que en su propia cocina pueden tener un exfoliante y anticelulítico de gran eficacia ?

Muchas personas toman café, pero tiran los posos. Un error, porque además de poder emplearse como fertilizante para nuestras plantas es un perfecto anticelulítico y exfoliante.



La cafeína, usada de manera tópica, ayuda a combatir la retención de líquido y es uno ingrediente habitual en los productos para combatir la celulitis.

Frotándonos en la ducha con la piel húmeda las zonas conflictivas conseguiremos además de tener la piel suave combatir la antiestética celulitis. Para una mayor eficacia, si disponen de tiempo pueden envolverse unos minutos las zonas a tratar, tras masajearlas con los posos de café, con un film de plástico de cocina.

Al aclarar con agua el producto se retira con total facilidad.

martes, 12 de octubre de 2010

Romero contra la alopecia


Lo dice la sabiduría popular y no se equivoca: el romero ayuda a combatir algunos tipos de caídas de cabello, en especial las estacionales.


Se usa como alcohol de romero en los casos de cuero cabelludo graso, y como infusión con la que aclarar el cuero cabelludo repetidas veces tras el lavado si la piel es seca o está sensibilizada.



Además, estos aclarados con una infusión cargada de la planta mejora en muchos casos los problemas de caspa.

lunes, 11 de octubre de 2010

Exfoliante labial casero

En ocasiones tenemos pellejitos resecos en los labios y resultan antiestéticos con o sin maquillaje. Intentar eliminarlos tirando de ellos es un error, podemos hacernos heridas.

La manera más efectiva consiste en hacer una exfoliación labial, con un producto específico comprado o preparado. En este último caso no hay más que mezclar un poquito de azúcar con un par de gotas de aceite puro de rosa mosqueta y frotar suave pero insistentemente la zona con movimientos circulares.



El exceso se retira con un paño húmedo. ¡ Resultado perfecto !