Truco casero para dar brillo al cabello

Cuando el cabello está opaco debemos averiguar si está reseco o no. En el primer caso, aparte del truco que vamos a contar a continuación, se deberán emplear aceites nutritivos antes del lavado.

Pero en ambos casos el brillo del cabello se verá incrementado si tras el lavado aplicamos un chorrito de vinagre en un poco de agua y con ello hacemos un aclarado final de la melena. También puede aplicarse la mezcla en un palancana pequeña o similar y sumergir unos minutos el cabello en el agua con vinagre.

Este truco funciona porque el vinagre, al ser ácido, cierra las escamas de la queratina del cabello.

Para melenas con tendencia a engrasarse, sobre todo si son rubias, puede sustituirse el chorro de vinagre por el zumo de un limón, el cual además de brillo potenciará los reflejos dorados naturales.

Remedio natural para labios agrietados

Las grietas en los labios son, además de antiestéticas, molestas e incluso peligrosas: se pueden llegar a infectar.

Desde el punto de vista estético, un labial siempre lucirá mejor en unos labios lisos y cuidados. Más aún si usamos un tono de la gama de los rojos.

Que no cunda el pánico, pues existe un remedio natural infalible contra los labios agrietados, cuarteados y resecos.

Basta con aplicarse con un suave masaje con la yema del dedo un par de gotas de aceite de rosa mosqueta puro justo antes de irse a dormir, con cuidado de no ingerirlo. Casi siempre con una única aplicación se soluciona el problema. En caso contrario, se repite el procedimiento a la noche siguiente.

Y si no disponen de aceite de rosa mosqueta puro en casa pero sí de aceite de argán de igual pureza, también sirve, empleándose de la misma manera.

Exfoliante corporal casero con arena de playa

La arena de playa constituye un excelente material para hacer exfoliantes corporales caseros. Sobra aclarar que debemos emplear arena fina, no la de calibre grueso que ya puede considerarse gravilla.







Cuando vayamos a la playa recogemos en un tarro arena, sin más, y después cada vez que deseemos hacer una exfoliación profunda de la piel del cuerpo, nunca del cutis, llevamos una pequeña cantidad de arena en un tanque o similar, seca, con nosotros a la bañera. Con una cucharilla suele bastar.

A continuación se puede optar por mezclar antes de meternos bajo el chorro de la ducha el gel que vayamos a utilizar con la arena apartada, o bien como yo hago: voy vertiendo un poco de arena sobre el gel que he depositado en la mano previamente.

Debe tenerse cuidado de no frotar con fuerza en la zona del escote, por ser una zona con piel delicada.